Con el propósito de armonizar la legislación morelense con las reformas a la Constitución Federal relativas a maíces nativos, la diputada Jazmín Solano López, presidenta de la Mesa Directiva del Congreso local, presentará iniciativas para reformar el artículo 2 Ter de la Constitución Política y el artículo 1 de la Ley de Protección y Conservación del Maíz Criollo en su Estado Genético, al considerarlo como parte de nuestra identidad y alimento básico de nuestro pueblo.
La legisladora destaca que en Morelos coincidimos con la reforma constitucional publicada el 17 de marzo de 2025 en el Diario Oficial de la Federación, en materia de conservación y protección de los maíces nativos, pues el Poder Legislativo local, diez años antes de esta modificación ya había expedido la Ley de Protección y Conservación del Maíz Criollo en su Estado Genético.
En ese contexto, presentará su propuesta de reforma al artículo 2 Ter de la Constitución del Estado para establecer al maíz criollo en su estado genético, como base de nuestra identidad y alimento básico de nuestro pueblo morelense, así como mantenerlo libre de modificaciones genéticas producidas con técnicas que superen las barreras naturales de la reproducción o la recombinación, como las transgénicas.
La reforma declara también que en el territorio estatal todo el uso del maíz genéticamente modificado debe ser evaluado en los términos de las disposiciones legales para quedar libre de amenazas para la bioseguridad, la salud y el patrimonio biocultural de la entidad y su población. Debe priorizarse la protección de la biodiversidad, la soberanía alimentaria, su manejo agroecológico, promoviendo la investigación científica-humanística, la innovación y los conocimientos tradicionales.
En cuanto a la reforma al artículo 1 de la Ley de Protección y Conservación del Maíz Criollo en su Estafo Genético, lo armonizar con la reforma federal además de que prioriza la biodiversidad, la soberanía alimentaria y el manejo agroecológico, promoviendo la investigación científica, la innovación y los conocimientos tradicionales; establece también la obligación del Estado para fomentar el desarrollo rural y cultural mediante el uso de semillas nativas y sistemas tradicionales como la milpa.